La relación entre el Derecho y la política

Entre el individuo y la población


La relación entre el ejercicio del Derecho y la política es compleja y multifacética, ya que ambos campos están interconectados de diversas maneras. La formación legal sirve como sólida base para ingresar al ejercicio de este campo laboral público. La habilidad para comprender y analizar cuestiones legales complejas es valiosa en la toma de decisiones políticas, en la participación en el proceso legislativo y en muchos otros aspectos de la vida dedicada al servicio público en este ámbito.

La experiencia en la redacción de leyes y políticas públicas es una necesidad para el desarrollo de un proyecto o visión futura de una sociedad específica, y los abogados conocen y comprenden ese aspecto ya que es parte de su desarrollo disciplinar, antes de dar el salto a la política. Aquellos abogados cuyos intereses se centran en los proyectos de desarrollo para países y sociedades pueden encontrar en la política una plataforma más amplia para nuevas oportunidades y desafíos y cuentan para ello con ventajas disciplinares notables. Hay un sinnúmero de diferentes áreas donde estas ventajas son aplicables. 

El primer caso a exponer es el más claro y  evidente: trabajo en el sector público. Hay muchas oportunidades que los abogados pueden encontrar en el gobierno de turno y que se relacionan con aspectos políticos, como por ejemplo el nombramiento de jueces y fiscales. En muchos países, esos nombramientos suelen tener un componente político, donde quienes gobiernan, a menudo, influyen en la selección de candidatos que comparten su visión ideológica. Un ejemplo destacado fue el proceso de confirmación de la jueza Amy Coney Barrett en la Corte Suprema de los Estados Unidos en 2020, que generó un intenso debate político debido a la rapidez del proceso y las implicaciones ideológicas. 

Por el otro lado, una de las responsabilidades importantes de estos profesionales en el gobierno es el Litigio Gubernamental donde participan en litigios en nombre del gobierno o defienden al gobierno contra demandas. Esto puede incluir casos relacionados con derechos civiles, disputas regulatorias o desafíos constitucionales, y dentro de estos litigios uno de los ámbitos más valorados es en el lobbying para representar los intereses de clientes ante legisladores y funcionarios gubernamentales.

El segundo caso es menos evidente pero significativo en su impacto en el destino de las sociedades y que incluso puede tener repercusiones internacionales y se refiere al trabajo con Organizaciones No Gubernamentales. Uno de los ejemplos más conocidos de estas instituciones es la ONU, la que siempre requiere de abogados, de diferentes especialidades, para trabajar en ámbitos de política pública, justicia social entre otros. La diferencia en contraste al trabajo relacionado con un gobierno específico es su enfoque más global para encontrar posibles soluciones que gobiernos locales pueden implementar.

Muchos abogados deciden trabajar en el sector publico por una variedad de razones, las oportunidades, los beneficios y los desafíos.

Entre los inusuales y las leyendas

En un plano más convencional un abogado siempre puede entrar en un estudio de abogados del Derecho Público y/o Político, en los cuales los abogados y fiscales investigan para representar en casos públicos, en nombre de los intereses de personas y/o nación.

En comparación el cuarto caso es uno que normalmente no se relaciona directamente con el ejercicio del Derecho y se refiere a trabajar en medios de comunicación como comentaristas políticos. Los abogados no son los únicos que están al tanto de aspectos y actores legales, los medios también tienen el deber de reportar estos cambios, propuestas de leyes, cambios de gabinetes, entre otros.  Y en un análisis de situación muchas veces no sirve sólo presentar los hechos, por lo que los medios de comunicación contratan a abogados para que puedan explicar las ramificaciones e impactos dentro de situaciones y sus marcos de gestión y legales, pudiendo comunicar así de mejor manera que es lo que está pasando y cómo puede afectar a la población.

Sin duda, el ámbito de mayor importancia de relación entre política y Derecho se visualiza en los casos de abogados, dedicados a la política para cambiar desde esta plataforma, situaciones sociales, económicas y/o culturales en los diferentes países como líderes políticos. Porque no basta con tener un proyecto o idea, es necesario tener muy claro cómo poder implementarlo y tener los dotes para poder transmitirlo, con habilidades de comunicación desarrolladas. Todas estas características son desarrolladas y aprendidas por los abogados en sus estudios y sirven de base para poder llevar a cabo proyectos y tareas muchas veces titánicas.

Ejemplos de esto hay muchos en la historia: abogados que han tomado las oportunidades que les da la política para dejar su marca, tales como Nelson Mandela, quien desempeñó un papel fundamental en la lucha contra el apartheid en Sudáfrica y sentó las bases para la reconciliación de las diferentes etnias de ese país. Mandela se convirtió en el primer presidente negro del país después de su liberación de prisión en 1990. Abraham Lincoln quien antes de ser el decimosexto presidente de los Estados Unidos trabajó como abogado. Es recordado por liderar al país durante la Guerra Civil y por su papel en la abolición de la esclavitud y consecuente cambio social profundo. Y finalmente Ruth Bader Ginsburg, que antes de convertirse en la segunda mujer en servir en la Corte Suprema de los Estados Unidos, fue abogada y profesora de Derecho, y una defensora destacada de los derechos civiles y la igualdad de género.

La conexión entre abogados y carreras políticas es una realidad arraigada, ofreciendo a los profesionales legales una vía efectiva para abogar por cuestiones importantes, al expandir los límites de su desempeño profesional, en pos de ayudar a la población y a los países en que residen.  Sin embargo, esta transición también conlleva la necesidad de gestionar desafíos éticos y la percepción pública de la carrera legal del individuo.

Nelson Mandela, Abraham Lincoln, Ruth Bader Ginsburg, Martin Luther King Jr., Mahatma Gandhi y más son abogados y políticos que lograron un impacto en su sociedad.

Ya sea por las oportunidades, por los desafíos o por las responsabilidades la combinación de carreras entre ser abogado y ser político promete una carrera interesante.

 


¿Qué área de práctica es para ti?

¿Qué área del Derecho es las que más se ajusta a tu personalidad?

¿Qué área de práctica es la más estresante? ¿En cuáles se gana más dinero?
¿Cuáles tienen jornadas más extensas? ¿Cuáles son las más intensas emocionalmente?

Video: Lawyer coach

Revisa en un minuto las características de las principales área de práctica que ofrece el Derecho.


¿Hay que poner foto en el CV?

La pregunta de la foto


Al momento de buscar un trabajo, la herramienta fundamental es un documento que bien puede tener sólo una página o la plataforma que lo contiene como es el caso de la red social LinkedIn: El Currículum Vitae (CV), cuyo propósito es explicar en resumen los estudios, experiencia, habilidades e intereses de un postulante y las razones y conocimientos que lo hacen ideal para un cargo. Es la primera impresión de los reclutadores sobre un candidato, debe destacarse y contener información relevante que decidirá si es o no interesante para el puesto en cuestión, definiendo la posibilidad de avanzar en un proceso y de eventualmente conseguir un trabajo. Para maximizar su efectividad, es fundamental comprender la importancia de forma y fondo, ya que al combinar contenido sustancial y relevante (fondo), con una presentación visual atractiva (forma), se aumentan las posibilidades de destacar entre los candidatos y captar la atención de los empleadores en la búsqueda laboral.  Es en este último aspecto (forma) donde se plantea un interrogante sin solución definida, que depende de factores difíciles de precisar y que bien puede ser determinante en una postulación:

¿Debería tener un CV la foto del postulante?

La forma del currículum se refiere a su presentación visual y estructura. Y dentro de esta “diagramación” la pregunta de si incluir o no fotografía es causa de debate. Por un lado muchos argumentan que el CV es un documento profesional, parecido a un contrato y por lo tanto no se deberían añadir detalles personales como una fotografía, otros argumentan que la fotografía de un Currículum refiere, no a la apariencia del profesional sino a una forma de presentación visual, que en su forma dice mucho del candidato y que complementa la información del documento. 

Aquellos que respaldan la inclusión de fotografías en el currículum argumentan tres beneficios principales. En primer lugar, destacan el aspecto de profesionalismo y transparencia, argumentando que añadir una foto puede personalizar el currículum, permitiendo a los empleadores conocer a la persona detrás del documento. Además, señalan que la inclusión de una imagen puede contribuir a la construcción de una marca personal, haciendo que el candidato sea más memorable en ciertos casos. Por último, sostienen que, en algunas culturas, la inclusión de una foto se considera una norma y parte estándar de la aplicación, lo que refuerza la importancia cultural en este debate.

Dentro de los que enumeran los detractores de la foto aparecen varios problemas, como el riesgo de una posible discriminación basada en la apariencia física. Argumentan que el currículum debe centrarse en las habilidades, la educación y los logros profesionales y no en la apariencia física. Además se debe tener cuidado con normas o regulaciones específicas sobre la inclusión de fotos en currículos, en lugares o empresas específicos donde incluso puede ser ilegal solicitar una foto como parte del proceso de contratación debido a preocupaciones de discriminación.

Mostrar la foto en un CV es una decisión que tiene tanto beneficios como desafíos lo que causa debate entre los postulantes sí deberían ponerla o no.

La importancia del país

Desde el 2014, Work On Law decidió hacer un estudio para determinar las variables que pueden llevar a una respuesta a la pregunta de la foto en el ámbito del derecho y la respuesta a la que llegó es…. que depende. A las preguntas planteadas por WoL de si los abogados deberían poner una fotografía en el CV o en LinkedIn, la respuesta de abogados de Chile, Colombia y México, fue dependiente de la forma y plataforma en que se muestra el CV y de las costumbres del país en que el abogado postule a un trabajo.

[Video] ¿Me conviene tener  foto en mi CV?

De acuerdo con esta investigación, el porcentaje de abogados que decide poner una foto en su Currículum en Colombia por ejemplo, ha aumentado en los últimos años mientras que en Chile ese hábito es extremadamente raro. Eso se debe a que en este último país, el CV de un candidato a un trabajo del mundo legal, se considera extremadamente formal y el futuro empleador, lo mira como un anticipo de la capacidad de un abogado para adaptarse a un documento formal, que luego en su nuevo empleo deberá producir en otras situaciones.

En cuanto a la plataforma, Work on Law recomienda a sus postulantes siempre tener la mejor fotografía posible en LinkedIn, debido a su estructura preconstruida como red social, donde, si no la tienen, quedan en una gran desventaja frente a los otros postulantes que cuenten con una. En cambio en WoL no permitimos la inclusión de fotografías en nuestros perfiles. Esto porque si bien muchos estudios jurídicos invierten mucho en imágenes profesionales para mostrar a sus equipos, una vez conformados, la selección de acuerdo con nuestra opinión, sólo debe ser por méritos y nunca por el aspecto de una persona. La sola posibilidad de una discriminación por la inclusión de una fotografía nos define en contra de su inclusión. 

¿Debería tener una foto mi CV o en LinkedIn? En la última no cabe duda, y en el CV, aunque hay ventajas y desventajas, de acuerdo al estudio realizado por WoL., depende de dónde y cómo. Es una decisión que cada postulante debe tomar informadamente, para lo que ponemos a disposición este video y nuestra experiencia. Porque como dijimos, un currículum efectivo equilibra forma y fondo para ofrecer una imagen profesional y persuasiva del candidato. Y la pregunta de la foto es una que bien puede definir las posibilidades en un proceso laboral.

En países como Colombia más y más postulantes ponen fotos para diferenciarse, mientras que en Chile la costumbre casi no existe

¿Cuál es la respuesta correcta? ¿Tener una foto y ser más personal? ¿O quitarla y ser más profesional? Eso es una respuesta que solo el postulante puede responder.

 


Ficción disciplinar: películas que todos los abogados deben ver

Entre Padres, Madres y hombres enojados


Estamos en una época del año en que en nuestro hemisferio sur es verano, época de vacaciones donde suele tenerse un poco más de tiempo para el descanso y para leer, maratonear series o dedicar un tiempo al género del cine.

Si bien la receta general es la de no mezclar descanso con trabajo, la verdad es que, como dice el antiguo dicho, uno es lo que come o en este caso uno es la disciplina que ejerce. En este sentido, dedicar algo de tiempo libre a esta disciplina a través del entretenimiento tiene mucho sentido y con tantas plataformas disponibles es una gran oportunidad para ver casos disciplinares en diferentes partes del mundo: desde clásicos atemporales hasta producciones más recientes, el cine ha abordado una variedad de aspectos relacionados con el Derecho, proporcionando al público una ventana única a los desafíos éticos, la lucha por la justicia y la intriga legal. Estas narrativas no sólo han entretenido al público, sino que también han planteado preguntas éticas y morales que resuenan en la sociedad. De estas películas hicimos un pequeño listado, que quizás pueda dar luces sobre grandes producciones a las que dedicar esos tiempos de descanso pero que construyen cultura disciplinar.

Twelve angry men (o Doce hombres sin piedad en España y Doce hombres en pugna en Hispanoamérica) es uno de los primeros clásicos que siempre deberían aparecer en cualquiera de las listas de imperdibles del cine relacionado con el Derecho. El clásico de 1957 cuenta la historia de 12 hombres de un jurado estadounidense que tienen que llegar a un terrible veredicto de culpabilidad o inocencia para un joven acusado del asesinato de su padre, que podría llevarlo a sentencia de muerte y aunque 11 de los 12 están convencidos de que el muchacho es culpable, el jurado número 8 no está tan convencido y expone sus dudas….

 

In the Name of the Father (En el nombre del Padre) es otra película que ningún abogado debería dejar de ver, pues muestra uno de los casos de corrupción policial y negligencia judicial más famosos del mundo, y uno de los más violentos. Detalla el caso real de los cuatro de Guildford, tres hombres irlandeses y una mujer inglesa que fueron acusados erróneamente del bombardeo de un bar de Guilford en 1974. Tanto ellos como miembros de su familias fueron condenados a cadena perpetua y pasaron 15 años en prisión. La película relata la lucha de Gerry Conlon por probar su inocencia y la de su padre. Este caso produjo cambios efectivos en el sistema judicial del Reino Unido.

 

Erin Brockovich es una película que demuestra las habilidades blandas que puede necesitar un abogado y la importancia de la relación cercana con un cliente. Relata la historia real de Erin Brockovich quien, a pesar de no ser una abogada, fue la principal responsable de resolver un caso legal contra la empresa Pacific Gas and Electric Company (PG&E), que contamina el agua de una localidad produciendo enfermedades y muerte a los habitantes del pueblo de Hinkley, California.

12 Angry Men nos enseña que no hay tal cosa como un jurado o juez sin prejuicios, ya sean positivos o negativos, y por lo tanto los abogados y fiscales no deben tomar ningún caso como asegurado. 

El veredicto de un pajaro

The Veredict (También conocida como Veredicto Final en España y Será justicia en Argentina) es otro clásico creado por Sidney Lumet, director de 12 Angry Men. La película cuenta la historia de Frank Galvin, un abogado en el punto más bajo de su vida que encuentra un caso de mala práctica en un hospital de la Iglesia Catolica, Frank es afectado por el estado de la víctima y decide enfrentarse a un equipo de fiscales respaldado por la Iglesia para llegar a la verdad del caso, a pesar de la oposición que enfrenta incluyendo al juez mismo.

 

Y finalmente ninguna lista de películas que los abogados deberían ver estaría completa sin uno de los clásicos más conocidos, To Kill a Mockingbird (También conocido en España, Ecuador y Perú como Matar a un ruiseñor, en México ¿Como matar a un ruiseñor? y en Venezuela Para matar un ruiseñor). Es una película que fue considerada como “cultural, histórica y estéticamente significativa” por la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos y fue seleccionada para ser preservada en el Registro Nacional del Cine. Cuenta la historia de la familia de los Finch, el abogado y padre Atticus Finch y sus dos hijos que crecen en una difícil situación económica y social en la década de los 30, llena de racismo y crisis. En estas circunstancias Atticus Finch decide defender a un joven afroamericano acusado de violación a una mujer blanca.

La lista es larga pero no podemos dejar de mencionar películas como A Few Good Men (1992) (conocida como Algunos Hombres Buenos en España y como Cuestión de Honor en Hispanoamérica), con notables actuaciones de Jack Nicholson y Tom Cruise o Just Mercy (2019) (o Cuestión de Justicia en España y Buscando Justicia en Hispanoamérica), en la que actúan Michael B. Jordan y Jamie Foxx. Para terminar The Trial of the Chicago Seven (2020) (o El Juicio de los Siete de Chicago) dirigida por Aaron Sorkin y protagonizada por Eddie Redmayne, Sacha Baron Kohen y Michael Keaton, es un imperdible de este género.

Esta es nuestra recomendación para en el tiempo de ocio sentarse y reflexionar, no sobre el trabajo sino sobre la disciplina, representada y contada a través de casos emblemáticos. Las habilidades y actitudes duras y blandas que se necesitan y las áreas que pueden desarrollarse este 2024, con ficción que tiene una lección para enseñar.

To Kill a Mockingbird es uno de los clásicos más importantes para un abogado, pues muestra como ha evolucionado el sistema desde el pasado.

Hay muchas películas que los abogados pueden disfrutar que todavía tienen lecciones importantes a pesar del conocimiento y/o la experiencia que posean.

 


Nuevas tecnologías en Propiedad Intelectual

Las realidades de una nueva era


Vivimos en una sociedad en constante actualización, en la cual la posibilidad de una innovación que cambie la forma en que todos los ámbitos laborales se desarrollan puede estar a la vuelta de la esquina. Esta es la razón por la que varias profesiones se están adaptando no sólo a los beneficios que pueden traer las nuevas tecnologías sino también a los desafíos que inevitablemente aparecen con su aplicación. 

Un buen ejemplo de esto en el mundo del Derecho es todo lo referente a  propiedad intelectual. ¿Por qué? Porque es una de las áreas del derecho que lidia con límites que ya era necesario defender y proteger antes de la aparición de las nuevas tecnologías y en especial de la inteligencia artificial y cuyos problemas se han acentuado exponencialmente. Hablamos de temas como la originalidad y creatividad, los derechos de autor, innovación y patentes, protección de datos y privacidad, licencias de uso, marcas, secretos comerciales, etc. 

Es un hecho indiscutible que las personas y corporaciones quieren proteger sus secretos y marcas, los creadores intelectuales quieren mantener sus derechos de autores y/o patentes, etc. Pero la realidad es que tecnologías como la Inteligencia Artificial (IA) han añadido varias complejidades y desafíos a una tarea ya por sí difícil y que los abogados especialistas deben afrontar con estrategias creativas y habilidades innovadoras. Porque la Inteligencia Artificial permite mejorar procesos y gestiones, pero plantea nuevos problemas y retos para los profesionales asociados.

En cuanto a los beneficios, la introducción de la Inteligencia Artificial permite la automatización de procesos legales, la IA puede ayudar a agilizar procesos legales, como la revisión de casos, análisis de infracciones y redacción de documentos. Los abogados pueden aprovechar estas herramientas para mejorar la eficiencia y dedicar más tiempo a aspectos estratégicos. Además, la IA permite a los abogados desarrollar estrategias de protección avanzada, herramientas de monitoreo automatizado y análisis predictivo, que pueden ser empleadas para prevenir infracciones y situaciones complejas, incluso antes de que ocurran.

Debido a los avances tecnológicos, muchos abogados han aprendido más acerca de la tecnología o han reclutado expertos.

Desafíos de identidad y propiedad

Por otro lado, crea varios desafíos para los abogados de propiedad intelectual, tales como las infracciones automatizadas. La automatización impulsada por la IA ha dado lugar a métodos cada vez más sofisticados de infracción de derechos de autor. bots y algoritmos pueden replicar obras protegidas de manera rápida y eficiente, con cambios pequeños y analizados que permiten saltarse los derechos de autor,  planteando desafíos en la identificación y persecución de infractores. El mejor ejemplo es la reciente demanda presentada por The New York Times contra Open AI y Microsoft por uso de contenido con derecho de autor. Casos como al arte creado por la Inteligencia Artificial u otras creaciones intelectuales, como por ejemplo libros, creados específicamente a través de estos dispositivos, todos basados en obras de autores ya publicadas, crean un área gris que es difícil de definir. Si una obra de arte fue creada utilizando la Inteligencia Artificial a partir de información y conocimientos de otros, que le fueron programadas, ¿a quién le pertenece la idea? Es fácil decir que a las fuentes originales, pero queda la duda con respecto a cómo los investigadores o creadores construyen sus descubrimientos y nuevas ideas. ¿No es en base a conocimientos y descubrimientos anteriores? ¿No se dice que no es necesario inventar la rueda cada vez? ¿No creamos como humanos en base a conocimientos ajenos, por lo que la máquina está repitiendo nuestro mismo mecanismo en forma más eficiente y rápida?

La persona que presentó el concepto original, o conocimiento base de una nueva idea entonces ¿merece créditos o beneficios de los derechos de autor sí no creó la obra nueva por su propia cuenta? Y si la obra le pertenece a la herramienta ¿Esto significa que la obra es considerada parte del dominio público? O ¿le pertenece al creador de la herramienta?

Actualmente no hay una ley internacional que regule estas interrogantes por lo que los abogados dedicados al tema, están muchas veces a la deriva y a su propia capacidad de innovación y creatividad, cuando enfrentan estos dilemas. Deben contemplar leyes locales y regulaciones internacionales para en forma creativa solucionar los problemas legales asociados con estas tecnologías. Responsabilidades como el asesoramiento de la ética profesional y legal del uso de la IA, que exige de los abogados estar preparados para ofrecer asesoramiento sobre la ética en el desarrollo y uso de la IA en el ámbito de derechos de autor, cada vez con más aristas y sin legislación definida. Esto implica considerar aspectos como la transparencia en algoritmos y la responsabilidad en casos de mala conducta algorítmica, todos aspectos nuevos y muy cambiantes en el desarrollo de la ley .

Otro aspecto de permanente cambio y adaptación es sin duda la protección contra las falsificaciones digitales, dado que las innovaciones en tecnologías permiten imitar a personas, voces y estilos, pero hacen los cambios que se requieran para “saltarse” la propiedad intelectual de un nuevo producto,  bajo el riesgo de que cualquier persona o plataforma pueda apropiarse de información y creación personal y la use para, profitar e incluso para cometer acciones ilegales o contrarias a los intereses de quienes establecieron sus bases.

Para todos los que han visto la película Jurassic Park, nunca tuvieron más sentido las palabras de Jeff Goldblum en su personaje de Ian Malcom: “estaban tan preocupados en si podían hacerlo que no se cuestionaron si debían hacerlo…”

El derecho y sus profesionales en esa encrucijada juegan un rol principal y fundamental.

La Inteligencia Artificial ha creado varias preguntas sin respuesta, y algunas que desafían más son las relacionadas con la Propiedad Intelectual

La Inteligencia Artificial no es solamente una herramienta o un desafío para los abogados, es una realidad a la cual se tendrán que adaptar para enfrentar a sus nuevas circunstancias.

 


Caso de estudio: el número de abogados en Colombia

El balance entre el conocimiento y el comportamiento


La profesión de los abogados es uno de los ámbitos laborales con mayor prestigio en el mundo, un trabajo asociado a alto conocimiento y dominio de materias, posibilidades de éxito financiero y laboral, entre otros. Es por esto que la carrera de derecho es una de las carreras más demandadas dentro de las carreras humanistas, y sin duda una en la que la población general deposita más confianza, una confianza que es necesaria en todos los ámbitos legales en que se especializan, todos ellos demandantes de un enorme conocimiento técnico y práctico, requeridos para manejar los desafíos de la profesión.

Esto crea un balance delicado entre el conocimiento y comportamiento ético-profesional que se imparte por las universidades y los desafíos que van evolucionando con el paso del tiempo. Conseguir mantener ese equilibrio debido a la calidad de los profesionales que ofrece es uno de los mayores retos. Sin embargo, cuando este balance se rompe, surgen una serie de problemas asociados muy graves para la población general, que da como un hecho el que los profesionales del Derecho no sólo conocen las leyes y formas relacionadas sino que son capaces de utilizarlas en diversos ámbitos y casos en forma correcta e innovadora, habilidad de la que depende su presente, futuro, patrimonio, libertad, entre otros. Este equilibrio en un mundo donde las Universidades proliferan muchas veces como negocio más que como centros educativos de calidad, genera una serie de delicadas interrogantes: 

¿Qué sucede cuando la educación recibida no es de calidad? ¿Qué es lo que pasa cuando los profesionales que invirtieron tanto tiempo, confianza y dinero en su educación no logran la calidad prometida y ejercen en un medio? Estas son las preguntas con las que debe lidiar cualquier país que se encuentre en estas circunstancias y son preguntas que ya se hacen abiertamente en Colombia y quizás debieran hacerse en muchos otros países, como lo reveló un informe de la Corporación Excelencia en la Justicia dedicado a estudiar la calidad de los programas de Derecho de las universidades de ese país.

Es necesario recalcar antes que nada la razón detrás de este informe, Colombia es conocido por ser tradicionalmente un país de abogados. Tienen la segunda mayor cantidad de abogados per cápita en el mundo, detrás de Costa Rica. Según los estudios realizados el 2019 por el Consejo Superior de la Judicatura de Colombia, había hasta ese año más de 300.000 abogados registrados para ejercer la profesión, y cada año se gradúan aproximadamente 14.000. Pero incluso hace 4 años ya se podía ver que había problemas ya que el Ministerio de Educación en Bogotá señaló que de los 183 programas de Derecho que ofrecían las universidades colombianas, sólo 46 estaban acreditados con alta calidad.

En la ultima década la cantidad de estudiantes que se han graduado de la carrera de Derecho se ha duplicado.

Desafíos creados por la educación

Y después de 4 años la situación no ha mejorado, la cantidad de abogados sólo ha crecido con el paso del tiempo. Actualmente por cada 100.000 personas en el país hay 728 juristas. Para comparar Europa tiene un promedio de 172 juristas por cada 100.000 personas. La Corporación de Excelencia en la Justicia realizó este año un estudio que analizaba 114 universidades para comparar cómo avanzó la educación para esta población cada vez más creciente: Lo que encontraron es que el 77% de estas universidades no alcanzan una calidad aceptable, y del total de las universidades solo un 20% eran universidades públicas.

Esto ha causado una serie de problemas en toda el área laboral del Derecho en Colombia. El primero de estas dificultades es la sobrepoblación de abogados: el 2022 se registraron más de 375.000 abogados en el país y se teme que el campo laboral del Derecho ya no tenga espacio suficiente para que los profesionales puedan encontrar dónde ejercerlo. Ha llegado hasta el punto en que un estudio realizado por la Corporación Universitaria Iberoamericana determinó que actualmente 4 de cada 10 abogados no consiguen empleo específicamente porque no tienen las habilidades que el mercado actual demanda (específicamente alrededor de la tecnología y el ámbito digital), habilidades que las universidades no han podido entregar debido a que los cambios de planes académicos no operan con la misma rapidez que las demandas del mercado.

Otro problema relevante que ha surgido recientemente son los conflictos éticos que han aparecido debido a la conducta de algunos profesionales del rubro. Según un estudio de la Corporación de Excelencia en la Justicia anualmente se imponen un promedio de 1.500 sanciones por malas prácticas a abogados en este país, lo que se ha asociado con una falla por parte de su educación ya que se ha notado que hay un mayor enfoque en la parte técnico jurídica y menos en la formación de valores ético-profesionales durante el estudio de la carrera.

El Derecho es una profesión crítica para la sociedad y uno de los ámbitos laborales más reputados a nivel mundial y hay pocos países en que el prestigio de los buenos abogados sea mayor que en Colombia. Es por este mismo motivo que la falta de calidad en la educación de los abogados es un problema urgente, en una sociedad en que hay una judicialización de las relaciones muy fuerte. Este es el caso Colombia, puesto en números y que debe llamar la atención de todos los otros países que están en las mismas circunstancias, aunque no las hayan puesto en cifras aún. Con la demanda del medio permanente a los abogados a innovar y actualizar la forma en que realizan su trabajo para una nación con tanta historia en el ámbito legal como Colombia, hay que preguntarse qué regulaciones y cambios son necesarios también, para mantener la calidad e innovar en su educación.

El año 2022 se registraron más de 375.000 y hay serias preocupaciones en el ámbito laboral acerca del balance entre la demanda y los abogados.

Afortunadamente el Gobierno de Colombia se dio cuenta de este desafío el 2019 y se están discutiendo reformas para solucionar esta situación.