Los tres actores


Cuando uno describe un caso legal, se puede argumentar que su estructura es similar al antiguo teatro griego. En los días de la Antigua Grecia, una obra sólo necesitaba cuatro elementos: tres actores, ni más ni menos, que representarán ciertas escenas usando máscaras y un coro que proporciona información vital. Es muy diferente de cómo lo hacemos hoy en día, pero también es sorprendente lo similar que es a los casos judiciales modernos.

Obviamente, no es una comparación exacta, pero las similitudes están ahí. Hay tres actores clave en un juicio: el juez, el abogado y el fiscal. Hay información de fondo que necesita ser presentada, el delito en cuestión y si el acusado es culpable o inocente, y hay un coro en forma de una variedad de testimonios, pruebas y otros elementos. Pero hay una diferencia clave aquí: los tres “actores” no son ajenos a este procedimiento, ni usan máscaras para ocultar su identidad, desde el momento en que entran en la sala del tribunal son parte de la historia y su relación entre ellos importa mucho.

Siempre hay una relación adversarial en el centro de las interacciones entre un abogado y un fiscal, esto es natural. Uno debe hacer lo mejor posible para probar que su cliente es inocente, y el otro debe hacer lo mismo para probar que es culpable, por lo que se espera un grado de rivalidad. Eso nos deja con la tercera persona en este trío, y la que tiene las mayores responsabilidades: el juez.

Un juez, por la naturaleza misma de sus deberes, debe ser imparcial, ya que son ellos los que no solo manejan la sentencia, sino que también regulan al abogado y al fiscal si actúan de manera injusta y tienen una serie de poderes autoritarios dentro de la sala del tribunal. Es precisamente porque tienen mayores poderes y responsabilidades que se espera más de ellos y de lo que tienen que hacer en un juicio tras otro.

Las obras en la Antigua Grecia eran una oportunidad para formar opiniones sobre aspectos de la sociedad...

Las expectativas para un actor imparcial

Pero, ¿cuáles son estas expectativas? Según Óscar Fernández León, Decano del Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla, hay varios elementos que se esperan de un juez para que la relación entre ellos y los abogados funcione eficientemente:

La primera y más importante expectativa para un juez es que esté informado, se espera que cada juez esté bien informado sobre los casos que lleva, para tener una imagen lo más completa posible de las circunstancias y posibles complicaciones del caso, lo que también significa que son capaces de resolver cualquier trámite procesal establecido de manera imparcial.

La segunda expectativa de un juez es su atención, manteniendo una actitud de atención plena y escucha activa durante la intervención de los letrados, para que puedan intervenir de manera asertiva cuando los abogados o los fiscales están mal usando argumentos, desviándose de su argumento o en cualquier otro caso que pueda inclinar injustamente la conclusión a favor de uno u otro a través de métodos ilícitos.

Y finalmente, la tercera expectativa, según Óscar Fernández León, es su actitud. Se espera que un juez sea firme en la sala del tribunal, para mantener la autoridad y asegurar que todos los procedimientos se realicen correctamente, pero también se espera que coordine y se comunique con los letrados de manera cordial y respetuosa para promover un procedimiento paciente y racional incluso en circunstancias estresantes.

Estos tres factores clave son necesarios para mantener una relación eficiente con los diversos abogados con los que los jueces interactúan en un juicio tras otro e incluso día a día. Se espera que cada abogado, independientemente de si es el defensor o el fiscal, descubra todas las pruebas y argumentos posibles para obtener el resultado que desean, por lo que algunos abogados utilizarán cualquier estrategia que sientan que pueden salirse con la suya, lo que significa que la necesidad de la intervención del juez es muy importante.

Estar bien informado, mantener tanto su atención como una actitud paciente y diligente frente a miles de juicios no es poca cosa para pedir a alguien, puede que sea imposible, pero en esta era de constante exposición e información abierta, es importante que el juez, el tercer y imparcial actor, se destaque como el intermediario para asegurar que se haga justicia.

...Lo que esta sucediendo hoy en día debido a la alta cantidad de información abierta al publico en los juicios actuales

Tres actores en el pasado, tres en la actualidad, y aunque los seis deben ocultar lo que sienten sobre los eventos ocurridos, es interesante que en el pasado esto se hiciera para la reflexión en la sociedad y en la actualidad se haga para hacer justicia.