Una nueva realidad en el 2026


Los datos personales son toda aquella información que permite identificar, directa o indirectamente, a una persona y que abarca desde datos de identificación, formación y localización, a datos sensibles, gustos personales e incluso comportamiento en las redes sociales, entre otros. Las bases de datos que se recolectan son una fuente de información valiosa, por lo que muchas veces se piden más datos de los necesarios para realizar diferentes tipos de actividades que luego se venden o reutilizan para otros fines. 

Esos datos son actualmente una parte fundamental del proceso de reclutamiento de talentos, que ha experimentado una transformación significativa en la era digital. Reclutadores y empresas ahora recopilan y gestionan grandes cantidades de datos personales para evaluar a los candidatos. Desde currículums y cartas de presentación hasta datos de redes sociales y referencias laborales, la cantidad de información disponible para los reclutadores es más extensa que nunca. Sin embargo, con este acceso a datos personales surge una responsabilidad crítica: gestionar y proteger adecuadamente esta información.

Al igual que en otros ámbitos, la gestión de los datos personales en el reclutamiento debe cumplir con las normativas legales, como el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) en la Unión Europea, la Ley de Protección de la Privacidad del Consumidor de California (CCPA), entre otras.

Chile, que había tenido una ley pionera para Latinoamérica en la Ley 19.628 del año 1999, se había quedado atrás en este tema y, a partir de Agosto del 2026, actualizará su Ley de Protección de Datos por primera vez. Con esta reforma muchas cosas cambiarán en la forma en que las empresas, estudios y otros pueden manejar los datos de las personas que postulan a sus cargos y la gestión general y específica de toda la valiosa información que constituyen las “bases de datos”. Será un cambio que actualizará la metodología y la ley del manejo de uno de los recursos más importantes de la sociedad contemporánea.

Es vital que haya una ley clara y actualizada sobre los datos personales, y el cómo afectará a los reclutadores y candidatos que dependen del manejo de estas bases para lograr un buen match de las capacidades de un candidato para un lugar y cargo específico está por verse. La reforma a la Ley 19.628 cambiará muchos aspectos en la relación entre los Titulares de los Datos, las personas a quienes les pertenece dicha información, y los Responsables de los Datos, las agencias, empresas, estudios y/u organizaciones a quienes se le entregan esta información. La ley afecta las actuales relaciones entre estos dos agentes a través de cambios en: los nuevos derechos de los Titulares, los nuevos deberes de los Responsables y la creación de una nueva organización fiscalizadora, la Agencia de Protección de Datos Personales.

La ley 19.628 se puso en efecto en el año 1999...Pero la tecnología ha avanzado demasiado desde entonces.

Derechos, deberes y la Agencia de Datos

Empecemos con los derechos de los Titulares. Actualmente en Chile algunos de estos derechos ya están activos, por ejemplo todo Responsable de Datos debe pedirle autorización a los Titulares para usar la información, y aunque esto se va a mantener, una vez que la Ley 19.628 se actualice, los postulantes podrían tener el derecho de involucrarse activamente en el uso de su información posterior a la entrega. El derecho de acceso capacita al Titular para obtener información acerca de cómo y cuándo se están usando sus datos personales. Por otro lado, derechos como los de supresión, oposición y bloqueo permiten al postulante eliminar parte o la totalidad de su información de la base de datos durante los procesos o al final de ellos. Esto impacta el trabajo de los reclutadores ya que el uso de las bases de datos de sus postulantes se hace mucho más compleja, porque la actualización de la Ley les devuelve su propiedad a los Titulares, de quienes depende la posibilidad de uso de esos datos en todo momento.

Después tenemos los deberes de los Responsables. El derecho de acceso y el deber de transparencia de los Responsables implican que los reclutadores y/o posibles empleadores, por ejemplo, se verán obligados a informar a los postulantes del uso y acceso a esa información durante cualquier proceso u oferta para la que son considerados, si el postulante lo requiriera. Adicionalmente desde el momento en que el postulante decida que pueden mantener su información, no importando el resultado del proceso específico, tendrán que aceptar la responsabilidad de mantener esos datos seguros y confidenciales, no podrán compartirlos con ningún actor interesado y tendrán que asegurarse de que la información esté segura. Cualquier brecha no autorizada de esta seguridad tendrá serias consecuencias, debido a los nuevos deberes de protección de datos que establece esta reforma.

Lo que nos lleva al tercer elemento que puede afectar el actual proceso de la búsqueda de talentos: la Agencia de Protección de Datos Personales. Esta nueva agencia hará cumplir los derechos y deberes de ambos a través de multas sustanciales que pueden afectar a reclutadores y posibles empleadores. Infracciones tales como el incumplimiento de información, la omisión de respuesta o alternativamente el uso de una respuesta incompleta, significará una multa de hasta 5000 UTM. Compartir estos datos, conscientemente o incluso sin permiso por robo o filtración, sin consentimiento llegará a una multa efectiva de hasta 10000 UTM. Finalmente modificar los datos personales de forma fraudulenta o vulnerar su confidencialidad significará hasta 20000 UTM de costo para los Responsables. Esto significa un mucho mayor cuidado con el acceso y manejo de estos datos, lo que evidentemente repercute en costos económicos para solventar estos cuidados.

Un buen manejo de los datos personales no solo protege la privacidad de los candidatos, sino que también mejora su experiencia y fortalece la reputación de reclutadores y empleadores. Esta ley renovada incluirá proporcionalidad en los datos que se piden a los Titulares, ya que manejar esos datos de ahora en adelante será una gran responsabilidad. El manejo adecuado de los datos personales en los procesos de reclutamiento es esencial para proteger los derechos de los candidatos y asegurar la legalidad y ética de las prácticas de contratación. La implementación de medidas de seguridad y transparencia no solo evitará problemas legales, sino que también contribuirá a generar una relación de confianza entre candidatos y empleadores. En un mundo donde la protección de los datos personales es cada vez más importante, gestionar esta información con responsabilidad es clave para el éxito organizacional a largo plazo.

Los Derechos de los Titulares, los deberes de los Responsables y la Agencia de Protección de Datos, tienen la capacidad de cambiar muchos aspectos de los ambitos laborales

El año 2026 podría marcar una nueva realidad para los ámbitos laborales. En Chile los datos personales se han utilizado de manera muy publica por lo que la modificación a la Ley de Protección de Datos puede llegar a ser un gran cambio para su sociedad.